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morochisima

Capitulo 9:

Martina es chiquita, suavecita, de cabellos negros y fuertes berridos. Tiene la naricita de la mamá y los mismos ojos del papá, llenos de vida, de curiosidad, de la inocencia de la niñez.
Martina tiene solo dos meses de vida, pero en tan poco tiempo ha llenado de orgullo el corazón de mucha gente, es maravilloso ser testigo como un ser tan pequeñito es capaz de hacer feliz a tantas personas.
Martina tiene piernitas regordetas que no paran de moverse, es inquieta Martina... llora mucho de día, y de noche también, creo que cuando crezca va a tener un carácter digamos que, algo especial. Y saben que... la quiero mucho a esta beba, capaz porque es mi primer sobrinita, la hija de una gran amiga, de una de esas hermanas que mis viejos no me dieron pero la vida se encargo de recompensarme, y muy bien recompensada!!!!
Es hermosa Martina y cuando crezca la voy llevar a la cancha de Boca y a ver un recital de Attaque. Cuando crezca le voy a contar cosas de cuando su mamá todavía no había conocido a su papá y juntas salíamos llevándonos el mundo por delante. Cuando crezca le voy a contar que el día después de su llegada al mundo real todos fuimos a conocerla, todos estábamos ansiosos por verle la carita a esa princesita que tanto se había hecho rogar. Cuando crezca le voy a mostrar ese test de embarazo que guardo como un tesoro en una de las páginas de mi diario intimo.
Cuando crezca le voy a leer este capitulo que escribí un 30 de diciembre del 2002, horas después de que se subió a ese colectivo en los brazos de su mamá, rumbo a otro lugar, el cual posiblemente será su nuevo hogar.
La voy a extrañar a Martina, a sus gritos ensordecedores, a su media sonrisa en la cara, a su mirada curiosa, a sus balbuceos graciosos, a su manera única de hacer feliz a la gente que la rodea.


“...Y tiene tanta fuerza tu minúscula presencia que ha borrado todo lo que estaba atrás.”

Del libro: “Cuentos para Verónica” de Poldy Bird

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